¿Cómo afectan los diferentes materiales a los ajustes de potencia, velocidad y frecuencia en el grabado láser?
Diferentes materiales influyen significativamente en los ajustes de potencia, velocidad y frecuencia en el grabado láser, ya que cada material responde de manera única a la energía del láser. Por ejemplo, los materiales más blandos como la madera y el caucho requieren ajustes de potencia más bajos y velocidades más altas para lograr un corte o grabado limpio sin quemaduras ni carbonización. Normalmente, un ajuste de potencia del 30-50% a una velocidad de 200-400 mm/s funciona bien para estos materiales.
Por el contrario, los materiales más duros como el vidrio o el metal exigen mayor potencia y velocidades más lentas para un grabado eficaz. Para el vidrio, a menudo se utiliza una configuración de potencia alrededor del 60-80% con una velocidad más lenta de 10-20 mm/s para asegurar que el grabado sea claro sin que se rompa la superficie. Los metales pueden requerir ajustes de potencia aún mayores (hasta el 100%) y velocidades ajustadas determinadas por el tipo específico de metal.
Los ajustes de frecuencia, que denotan la tasa de pulsos del láser, también juegan un papel crucial. Materiales como el acrílico o el plástico se benefician de frecuencias más altas para mayor precisión, mientras que las frecuencias más bajas son efectivas para grabados más profundos en materiales más densos. Comprender la interacción entre estos ajustes y el tipo de material es esencial para lograr resultados óptimos de grabado.